Extraordinaria velada en un restaurante de Lujo en Gualan. Para beber: coca-cola (para Rebeca), que Antonio tiene bastante con una bebida de té.Pero no conforme con el té, se ha permitido el lujo de tener además: el mejor licor de china (tipo orujo), vino chino ("que no hay quien se lo beba"), y zumo chino. Aunque para bebida la de Mike: Leche.
Para abrir boca uno de nuestros comensales se limpia las orejas con un palillo, apuntándonos con los dedos; "como ritual de bienvenida".
Después de este acontecimiento, y estuperfactos ante tal recibimiento decidimos sonreir. Pero a partir de este momento todo cambio.
En en centro de la mesa se encontraba un cristal giratorio, de tal modo que los platos giraban en torno a los comensales. No pocos platos había. La acumulación hacia que fuese imposible poder elegir alimento. Y para ellos el dejar un alimento en el "plato" quería decir que en seguida venían con más.
Desde que comenzo la velada no hicimos más que ponernos de pie para brindar con cada uno de los artistas "campie", teniendo que levantarnos en la cena unas 12 veces! (por lo menos).
Con esto y con todo, ha sido super agradable el poder asistir a esta cena. Entre brindis y brindis, hamos quedado para mañana hacer "tai-chi" a las 7.00 am.
Y luego nos han llevado de compras al corte inglés chino, ha sido emocionante.
Un besazo desde Alicante, pasadlo bien. Tu siempre Antoñito, tu principito. Ya me contarás cuando regreses.
ResponderEliminarPor cierto, llevad cuidado que ya se os están achinando los ojillos, jejeje.....
ResponderEliminar... lo cierto es que cada foto que nos hacemos, más cerrados tenemos los ojos... solo tenemos que aprender algo de chino y ya damos el pego...
ResponderEliminarjajaja un abrazo
antonio